miércoles, 15 de diciembre de 2010

La Navidad en la mirada de un voluntario

Hace unas semanas asistí al Congreso “Católicos y Vida Pública” que cada año organiza el CEU y la ACdP desde hace ya más de una década. El congreso se desarrolla en torno a conferencias de, digamos, los conferenciantes “estrella”, mesas redondas en las que participan diversos ponentes, además de actividades adicionales (proyección de películas, noche joven, etc.) y la oportunidad de compartir la comida y conocer gente nueva que suele ser de lo más interesante.

Una de las mesas redondas se llamaba “El encuentro con Cristo” y, junto al decano de la Facultad de Teología de San Dámaso y un misionero Idente , estaba anunciada una psicóloga y psicoterapeuta suiza. Enseguida me vino como una cierta prevención. Son tantas las reducciones psicologistas a las que la realidad se ve expuesta en el mundo actual: el hombre, la fe, las relaciones, la sexualidad, etc, que casi pensé en acudir a otra de las mesas redondas. Si no hubiera sido por la expectativa del título probablemente lo hubiera hecho.

Y sin embargo, cuando le llegó su turno a la psicóloga, de nombre Mercedes, comenzó a hablar sobre algo que yo no esperaba: la mirada, y ya me enganchó hasta el fin de su intervención.

Mercedes habló de la necesidad de mirar y de aprender a hacerlo. El hombre actual no es mirado (lo calificó como “el hombre al que nunca nadie miró”) y además teme la mirada del otro, porque cuando al hombre se le considera, ya desde niño, es para ser evaluado, medido, clasificado, analizado, etc. Esto supone que el niño es relativizado y medido, pero no es mirado, y no digamos ya cuando es forzado u objeto de abusos donde la relativización es absoluta, convirtiéndole en mero objeto o instrumento. La consecuencia es que el hombre ha aprendido a temer la mirada del otro y se rebela. La consecuencia es que vivimos en sociedades deshumanizadas, donde cada vez existen más “no-lugares” en los que lo importante no es lo que somos, sino nuestra función, la acreditación que portamos o la tarjeta de crédito que exhibimos. No deja de sorprenderme como el hombre de hoy está profundamente herido y al mismo tiempo envanecido de sí mismo.

Sin embargo frente a esa relativización del ser humano, Mercedes habló de la mirada tierna, de amor, contemplativa del otro, que sale desde dentro al encuentro de los demás, y que es una mirada que construye, una mirada fundante. Es una mirada que nos permite construirnos a nosotros mismos y sobre la que los demás también se construyen y que genera lugares de encuentro donde las personas verdaderamente pueden ser. Estoy de acuerdo en que sin esa mirada de amor, sin el amor, todo lo humano es nada más que vacío.

Y entonces pensé en Madreselva y en los voluntarios. Pensé en como las experiencias que hemos vivido en países del Sur nos han enseñado a mirar. A tener otros ojos con los que ver a los demás, salir a su encuentro y dejarnos empapar por lo que ellos son. Pensé como esos viajes nos han hecho descubrir lugares de encuentro donde lo importante no es lo que hacemos o la función que cumplen aquellos que conocemos, sino lo que somos y son. Pensé como esas vivencias, que en muchas ocasiones son parte de una búsqueda interior, han ayudado a la toma de conciencia de uno mismo desde el sentir y conocer nuestra pequeñez. Sin reconocer nuestra pequeñez y la necesidad del otro no es posible el amor, que es, a fin y al cabo, la auténtica medida humana de las cosas y la verdadera y plena expresión de la justicia.

Se acerca la Navidad, y en medio de toda esta agitación consumista donde, si no se niega, se evita a Dios, aún se intuye una llamada a mirar. Dios nos llama y nos pide que le miremos, ahí, en un pesebre, pobre, expuesto, desnudo, vulnerable, como tanta gente que los voluntarios hemos encontrado en nuestros campos de trabajo. Y nos lo pide porque contemplando ese misterio, el misterio de su Amor, es como nos ablanda el corazón para que podamos entonces verdaderamente, saber mirar a los otros y ser voluntarios desde el corazón.

Feliz Navidad a todos los que hacéis posible Madreselva.

Rafa Muñoz (voluntario de Madreselva)

lunes, 18 de octubre de 2010

Encuentro de voluntarios y voluntarias veteranos

El domingo 17 de octubre nos juntamos en la sede central de Madreselva para compartir nuestra experiencia en los campos de trabajo, programar para el curso 2010/2011 y proponer nuevas propuestas solidarias.Se expusieron;

R. Dominicana:

- La descubierta. Sandra y Cristina. Nos contaron los que hicieron este verano junto a Raquel en la Descubierta. Trabajaron y organizaron un verano educativo, a demás de visitar a familias, trabajar con niños y niñas con necesidades especiales, entre muchas otras cosas.

- Barahona. Luis, María, Vanessa y Miguel. Estuvieron con alfabetización de mujeres, campamentos, apoyo a niños y niñas con necesidades educativas especiales. Aunque realizaron otras tareas más puntuales como ayudar en el mercadillo, decorar el colegio…

Bolivia: Conchita nos conto la labor que se está haciendo en casa Maín. Nos siguió trasmitiendo esa ilusión y esperanza porque esas niñas tengan un futuro.

Nicaragua:Queti y María nos explicaron lo que estuvieron haciendo en Granada, las actividades del comedor Mama Margarita, la situación del país…

Angola: Rafa nos relató su aventura africana. Junto a Sandra en Luena (Angola) llevaron a cabo varias actividades desde pintar una capilla, el oratorio, talleres para los niños… lo que hiciera falta.

Mozambique:

- Inharrime. Lourdes, Samuel y Javi nos contaron su voluntariado en Inaharrime junto a Idurre. Ayudaron, orientaron, concretaron y analizaron el trabajo de un grupo de mujeres con vistas a montar su futuro negocio.

- Téte. Miguel explicó las actividades que había realizado junto a David este verano. Desde

montar una pista de fútbol, hasta alfabetización, oratorio, decorar las aulas…

Etiopía:

- Zway. Antonio y Cruz estuvieron en Etiopía junto a Clara y un grupo de voluntarios de la universidad de San Luis. Fue un voluntariado de cargado de actividad: clases de ingles, oratorio, talleres, escuela infantil, orfanato…

- Meki. Lucia estuvo en un orfanato haciendo labores de psicología y todo aquello que hacía falta.

Cuba: Maica, Belen y Raquel nos relataron su experiencia en Cuba y sus actividades con los niños de allí.

Paraguay: Mercedes nos explicó la labor que realizo con las profesoras de educación infantil y con los indígenas de la zona.

Honduras: Ceci, Nati y Ana Mª nos contaron su experiencia en el Hogar, las actividades con los niños, las necesidades de los mismos…

Fue una jornada con muchas ilusiones, experiencias, recuerdos, sueños y esperanzas…

Gracias por compartirlo con nosotros. Gracias por regalar vuestro tiempo, por vuestra ilusión, por vuestro trabajo, por querer… ¡Gracias voluntarios y voluntarias!

martes, 21 de septiembre de 2010

Cuba, un país con dos sonrisas

Dice la canción de Peces de Ciudad, que en Comala comprendí que al lugar donde has sido feliz, no deberías tratar de volver....y no seré yo quien niegue a Sabina, pero hasta los grandes genios se equivocan.

Yo no he estado nunca en Comala. ..he estado en Paraguay, en Perú, y este tercer año en Cuba, y mi mente vuelve a estos lugares cuando menos lo espero, en mi rutina diaria, y allí, os puedo asegurar que he sido Feliz.

Todo el mundo asocia Cuba a turismo; a playas preciosas, paseos por el Malecom de La Habana, sol, descanso y excursiones a lugares maravillosos, y si, es cierto que hay todo esto, pero nadie nombra lo mas importante, pueblos como Peñalver, Villa María, La Yuca o la Planta Asfalto, donde viven esos pequeños cubanos, esos “locos bajitos” con los que hemos trabajado este año, y que han hecho de mi voluntariado un mes inolvidable. Han hecho con sus acciones que sacará dos tipos de sonrisa en Cuba.

La sonrisa alegre, esa que he mostrado en innumerables ocasiones en el “verano educativo” al oír sus expresiones llenas de sentimiento cuando decían cosas como: pero tu que es lo que tienes mijito???? o ese tremendo elegante esta el dibujo!!!! o que pepilla (guapa) estas hoy Maica... y sonríes y ríes con ellos y piensas en lo felices que son, en las ganas de hablar que tienen siempre, y te preguntan todo, y tu les enseñan una canción y ellos te enseñan dos. Y cualquier taller les viene bien, y siempre quieren mas y tu imaginación ya no da... (por eso es muy bueno llevarte una compañera de viaje con ideas y mas ideas, Gracias Belén!!!)

Y luego está la otra....la sonrisa triste. Esa que pones al no poder evitar pensar que una cosa es jugar de local y otra muy distinta, ser visitante. Sonríes con la esperanza de que llegará un día que no haya fronteras, ni pasaportes, ni visados o cartas de invitación, que no seamos ciudadanos de aquí, o de allí, de este continente o del otro....que todos seamos ciudadanos del mundo y tenemos libertad para elegir donde vamos.

No quiero olvidarme de recordar desde aquí, a todas las personas que han estado pendientes de nosotras, especialmente a nuestra Mami Cubana que nos ha cuidado este mes y que nos enseñó la primera lección de tantas que hemos aprendido en este generoso país, “Ahorro, mijas, ahorro”.

Gracias a toda la gente que he conocido en Cuba, a todas las personas que han hecho que en este mes de Agosto de 2010, haya mostrado alguna de mis dos sonrisas, por su generosidad, sus atenciones, sus conversaciones, sus detalles.... y gracias a todos los voluntarios que habéis invertido vuestras vacaciones en hacer felices a los demás, especialmente Mirian Piqueras, voluntaria y amiga, que ha tenido la inmensa generosidad de ir un año de voluntariado a Chiure (Mozambique).

Maica Domínguez

El valor de un abrazo

Este verano estuve en Angola. Esta ha sido la primera experiencia de voluntariado que Madreselva ha realizado en Angola y también la primera vez, que tanto mi compañera de voluntariado Sandra como yo, hemos viajado a África y hemos tenido nuestro primer contacto con la realidad de este continente

Durante este tiempo estuvimos en la comunidad que las FMA tienen en el Centro de Estudios María Auxiliadora (CEMA) en la ciudad de Luena, próxima a la frontera con Zambia. La comunidad la forman 3 hermanas, Sirlei, Anna y Natalia y entre las 3 atienden y gestionan una escuela con enseñanza primaria, secundaria y alfabetización para adultos, además de una escuela de formación de profesorado. Con el trabajo que eso da, aún sacan tiempo para participar en la pastoral local, la organización de catequesis, oratorio, actividades de tiempo libre, colaborar en actividades de la parroquia, del obispado o de las comunidades locales y además para atendernos a nosotros, los voluntarios.

Con la perspectiva de toda esa actividad se hace difícil explicar en unas líneas, o resumir en unas palabras, lo que por encima de todo para mí ha sido una experiencia del corazón y una experiencia de acogida y de encuentro. Encuentro con la comunidad con la que hemos compartido este tiempo, incluyendo voluntarios de otros países, también con la comunidad salesiana de Luena y con la realidad de las parroquias y comunidades cristianas que allí viven su fe y, por supuesto, con los niños, esos que, entre los que menos tienen, casi siempre son los más indefensos y los más débiles.

Toda la experiencia de este mes ha sido intensa en su sencillez. Ningún día ha sido igual al siguiente, especialmente en las pequeñas cosas, en los detalles. Una sonrisa, un llanto que uno puede consolar, ir por una de esas calles polvorientas y que un niño te llame por tu nombre, un momento de oración con la comunidad, un juego en el oratorio, gente que conoces o con la que compartes un momento sabiendo que, aunque no haya posibilidad de profundizar en una amistad, hay algo que nos une que es nuestra fe común o el amor a los demás, estas son las cosas que han hecho de cada día un día especial. Todas ellas son, además, las que se van guardando en el corazón, y las que después alimentan, sostienen y enriquecen nuestras personas. También son las más difíciles de explicar cuando se vuelve a la rutina diaria en Madrid. Cuando vuelves la gente, generalmente, te pregunta por lo que has hecho, lo que has “producido”, cuando lo verdaderamente importante son esos detalles para el corazón, y lo que cuenta es lo que has vivido y lo que has “sido” en el encuentro con los otros y el valor de pequeños detalles como un abrazo. Además, pensando en lo vivido, te das cuenta de que en un mes poco se puede hacer , de que en una maleta no caben las cosas importantes, y de que la única cosa que puedes llevar para compartir y poner a disposición de los demás, a Angola o donde quiera que vayas, es a ti mismo, con todas tus limitaciones, con tu mentalidad occidental, con tus ideas preconcebidas que luego los niños descolocan en un instante, pero eso es lo único que tenemos para dar, aunque sea verdaderamente poco.

Durante estos días tambien he tenido oportunidad de conocer parte del inmenso trabajo que las hermanas y la Iglesia realizan en Luena y en toda la provincia de Moxico: sus dificultades, sus necesidades, los retos, lo que aún está por hacer, pero, al mismo tiempo, también tuve ocasión de experimentar la cercanía de Dios, de un Dios que se muestra en los rostros de los niños, de un Dios que se muestra cercano en sus favoritos, los que nada tienen, y que se hace presente en la vitalidad y sencillez de las comunidades cristianas que van surgiendo, y por supuesto en la increíble tarea de los misioneros, evangelizadores y educadores cristianos.

En medio de todos estos días no quiero olvidar uno muy especial que fue el de la visita de Madre Yvonne (superiora de las salesianas) y la oportunidad de compartir unas horas muy intensas con ella. Fue un estupendo e inesperado regalo. Hasta que llegamos a Angola no supimos que la Madre venía devisita en Agosto y su presencia aumentó aún más el valor de esta experiencia. Creo que ella fué un aliento para la comunidad y para la tarea tan intensa y difícil que lleva a cabo en Luena. Fue también muy bonito que los voluntarios tuviéramos la oportunidad de participar en la preparación de su visita, de estar cerca de ella, y de percibir su interés personal por cada uno de nosotros y nuestra tarea como voluntarios y creo que eso también enriqueció su paso por Luena.

Y después de todo lo dicho, y cuando la experiencia ya comenzó a dejar poso por dentro, solo queda una palabra, como pegada a los labios, que siempre es GRACIAS. Así, con mayúsculas y desde el corazón. Gracias a los niños, siempre los niños, por lo que me enseñaron y me dieron. Gracias a las hermanas y a mis compañeros de voluntariado por todo lo compartido, en las celebraciones, en la oración y en la alegría del día a día. Gracias a los misioneros, sacerdotes, seglares o consagrados, por su labor y por haberme dejado estar cerca de ella. Gracias a Dios por haberme permitido tener esta experiencia, por que si los más humildes son los favoritos del Señor, haber podido estar con ellos a lo mejor ha sido para estar más cerca de Él.

Rafa Muñoz

lunes, 20 de septiembre de 2010

Mi experiencia: Barahona, R. Dominicana

Este es el segundo año que salgo de campo de trabajo y cada año es diferente, especial y nuevo.

Barahona, ese fue mi destino este año, una ciudad al sur de República Dominicana.

Una ciudad muy pobre pero con las mejores playas de la isla, todo un paraíso natural.

El primer recuerdo que tengo de Barahona son su casas de madera y latón, sus calles (la mayoría) de piedra y arena, los niños descalzos, la gente sentada a la puerta de sus casas y la música muy alta. Una imagen que impresiona.

Pero el día a día te va metiendo en la vida de Barahona con sus gentes, con una sonrisa siempre, una invitación a sus casas, un abrazo de los niños.

Nuestro trabajo, el mío y el de mis tres compañeros, Luis, María y Miguel fue trabajar en el colegio de las hermanas salesianas en el barrio Enriquillo, donde trabajamos en un taller de alfabetización de madres, apoyo escolar a jóvenes y trabajo con niños con dificultades de aprendizaje.

Además de echar una mano donde se nos necesitaba, ayudando a Sor Ángela con los apadrinamientos, ir a buscar al pueblo cualquier coas que hacía falta, ayudar en la pulga( mercadillo) y de todo un poco.

No podemos olvidar nuestra visita a Haití, un país que sigue desolado por el terremoto, escombros, polvo, tiendas que campaña sigue siendo el panorama de Haití. ¡Queda tanto por hacer!

Agradecer a las hermanas Salesianas lo bien que nos trataron, nos sentíamos como en casa. Gracias Sor Eli, Sor Ángela, Sor Araceli y Sor Kirce. Gracias a mis compañeros- amigos con los que he compartido esta experiencia, gracias a vosotros también ha sido una experiencia muy especial. Gracias a toda la gente, niños de Barahona que compartieron esta experiencia con nosotros, nunca os olvidaremos porque ocupáis un lugar en nuestro corazón.

Gracias por hacernos ver el mundo con otros ojos.

Vanesa Galán

miércoles, 15 de septiembre de 2010

Recorrido por Mozambique

La responsable de voluntarios de Madreselva ha viajado por los distintos campos de trabajo que ofrece la ONGD en Mozambique, allí ha compartido con los voluntarios/as la labor tan bonita que están desarrollando y descubriendo otras posibles necesidades para futuros voluntarios/as.
Además acompaño a Cristina Araque Responsable de proyectos de África visitando los proyectos que tiene Madreselva por Mozambique y participó de la inauguración de tercera fase de la escuela primaria de Chiure.


En este año tenemos o vamos a tener los siguientes voluntarios/as en este país:

Inharrime: Tenemos a Idurre. Ella va estar un año en proyecto con mujeres.

Su idea es orientar, asesorar y enseñar, ayudar y colaborar con

un grupo de mujeres para que puedan llegar a cabo un proyecto laboral. Javi, Samuel y Lourdes han estado este verano con ella para ayudarle en esa labor.

Tete: Han estado Miguel Ángel y David.

Han trabajado con los niños/as del barrio, han ayudado con las instalaciones (sobre todo deportivas), su voluntariado fue compartido con Blanca y Susana de la ONGD Vides.

Chiure: Aquí estará Miriam por un año trabajando en un proyecto educativo de la comunidad. Trabajo que compartirá con tres voluntarias que están cerca de tres meses. Lucia, Alejandra e Inma que comenzarán a llegar a mediados de septiembre, principios de octubre.

jueves, 22 de julio de 2010

Desde Republica Dominicana. Tu sabes mucho!!!!

Hola a todos y as:
Finalmente estoy escribiendo en un formato windows 2000 para poder enviarlo en el momento que hay luz y funcionan los ordenadores y tengo tiempo libre de ir a internet e internet sólo hay que esperar 30 minutos para un ordenador libre (el único que actualmente funciona). Una combinación de factores que, como comprendeis, hace realmente difícil comunicar mi existencia aquí.

Este año no han cambiado tantas cosas, realmente todo sigue prácticamente igual, salvo niños que crecieron y algunas habichuelas que se perdieron por inundaciones. Lo que cambia es mi mirada, mi interpretación acerca de las cosas.

Siento una triste-alegría en mi corazón. Por un lado siento todo el amor que los niños me expresan y me piden en necesidades super-supremas un “chin” de caso(un poco de atención). Fundamentalmente los niños haitianos, que viven con sus hermanitos en una “piececita” (una estancia de 10-20 m2) donde tienen un colchón para 5—7personas y con suerte dos, o duermen sobre cartón o sobre el suelo mismo.

Por otro lado soy consciente de lo difícil que es realmente cambiar esta situación. Los papás o la mamá están solo con niños pequeños. No hallan trabajo. Son los niños los que tienen que hacer “los oficios” de pasar la fregona (“suape”), limpiar, cocinar,lavar ropa y platos, ir a por mangos, ir a por agua, limpiar botas, descargar camiones.... y en algunos casos cuidar bebés de 8 meses... NIÑAS DE 10 AÑOS!!!!!!

Es tan tremendo como nos habituamos rápidamente a otras realidades.....
Este año estoy haciendo pocas fotos y es que realmente a mis ojos ya no le sorprenden tanto como primera vez todas estas realidades.... PERO SON TAN PENOSAS que no acabarían de sorprenderte a cada instante!!! Y tantas y tantas cosas que se pueden hacer a cada momento....
Hay niños desnuditos por la calle y descalzos y SOLOS, andando sobre caminos de piedras, hierros oxidados y cristales o con suerte sobre una de las 3 únicas calles asfaltadas.

Niños que en cuanto tienen la capacidad de andar les sueltan solitos, andando y jugando a la deriva con clavos y piedras, o “jugando a ser mayores” pero cocinando de verdad, preparando y controlando el fuego, las brasas, o cuidando a los hermanitos inventando pañales con ropita sobre ropita. Ropita que compran por un precio simbólico de 10 centimos a veces son chaquetas de lana o jerséis de manga larga con el calor tan intenso... Ropa y cuerpo tan sucio y lleno de heridas y señales, tatuajes naturales que les quedarán de su dura vida desde los 5 añitos.
Niños con su barriguita hinchada de desnutrición solo llenada a base de arroz y guineo, y con suerte un vaso de leche algún día.... Los ojos amarillentos y perdidos y una memoria frágil para aprender, aprender siempre a base de fuertes gritos y golpes.... “niño tu eres odioso”. Es la cultura haitiana, es la necesidad.... dicen que es Dios que pone pruebas....

La educación de estos niños es difícil pues muchos de ellos no pueden ir a la escuela, pues no les dejan los papás tienen que hacer oficios... y cuando les llevan después de la lucha de una Hermana Sor Maria de los Angeles, pues les “votan” por su carácter rebelde y sus constantes llamadas de atención. Hablo de rebeldía cuando en mitad de la supuesta clase se levantan constantemente, me cojen los lápices, las gomas, se tumban en el suelo, van a beber agua y se ponen a bailar, me interrumpen constantemente con preguntas de estar en la inopia .... Niños de 7-12 años....
PERO Y A PESAR DE TODO ESTO............
HAY LUZ AL FINAL DEL TUNEL, lo veo, lo siento, lo percibo.... y LO SÉ. Poquitas cositas cambiaron desde el año pasado, pero siguen luchando y no se rinden, tienen a alguien que les da su apoyo, que tiene las ideas que recuerda constantemente para que no vayan a la deriva. Alguien que realmente CREE Y CONFÍA EN ELLOS Y tiene esa seguridad de que SABEN QUE PUEDEN. Mientras el niño pueda estudiar hay esperanza....
El día a día es duro buscando comida, únicamente pensando en supervivencia, de hecho ellos entienden muy bien la RELATIVIDAD DEL TIEMPO, pues no conocen los días de la semana, los meses, ni siquiera saben cuándo han nacido, cuando es su cumpleaños. Su edad la inventan o algunos papás lo saben o adivinan.

Pero aunque ellos no puedan conocer o planificar el próximo día, mes o año.... HAY FUTURO MIENTRAS HAYA NIÑOS. Niños que siempre tendrán la capacidad de crecer, y con ello aprender, vivir, experimentar, sorprenderse, percibir, jugar, amar y ser amados con alguien que le transmita esa confianza.... CREER EN ELLOS. Y YO CREO EN ELLOS SOBRE TODAS LAS COSAS Y EN SU CAPACIDAD DE CAMBIO. Cambio generacional sobre el mundo. Eso es lo que hace falta, eso es lo que necesita. Y eso es lo que va a suceder.... Aunque tendré que ampliar mi casa, pues he invitado a todos los que tengan 18 años y se puedan pagar su pasaje a España, jajaja.
Mientras tanto su aparente duro PRESENTE está lleno de sorpresas y emociones inesperadas pues YO APRENDO de ellos a disfrutar tanto del momento, de cómo van sucediendo las cosas, de cómo cada uno puede aportar su propia jugada para que la partida continué hacia uno u otro lado.
Eso es lo que tengo y lo que siempre tendré. Eso es lo que me llena el corazón y me da ilusión y esperanza. MIENTRAS HAYA VIDA HAY LUCHA Y HAY ESPERANZA. Jamás Se rinden. Esos abrazos quebranta espaldas que me pegan, besos y abrazos espontáneos a cada momento, la pelea por agarrar mi mano, las enormes sonrisas por las canciones y los juegos, la capacidad de observar cualquier detalle y hacer juego con un simple árbol. El interés, la escucha, la atención cuando les lees un simple cuento de caperucita antes de acostarse. Darles un beso de buenas noches y saber que mañana te estará esperando la persona que quieres........ Algo tan simple y que les hace tremendamente feliz. Algo que ya han vivido, que tendrán y que siempre les quedará...
Saber que me recordaban, recordaban mis juegos....es saber que me recordarán siempre....

Cristina Gómez Mate (Voluntaria)

martes, 20 de julio de 2010

La descubierta

“Juanito (el sereno), ¿ves a la mujer de la limpieza por las mañanas???” “¿Què? ¿Còmo? ¿Qué si beso a la mujel de la limpieza? Pero como dices eso, yo ya tengo mujel, jejeje.”

Me gusta el lugar donde estoy, me siento muy bien, acogida entre todas estas personas y sobre todo personitas que en seguida tienen un abrazo para ti. Seguramente estas palabras resultan bien conocidas a otros tantos y tantas voluntarios /as que salen este año. Después de 17 días en La Descubierta (República Dominicana), por fin me pongo de verdad a escribir sobre mi experiencia. Aquí estamos las voluntarias Raquel, Cristina y yo un poquito incomunicadas en lo que respecta a internet, por ello escribo en una computadora que hay en la casa para después llevar directamente el texto al único lugar del pueblo donde solo funciona un ordenador cuando hay luz. Me gusta, es una limpieza para mí la que estoy consiguiendo aquí al no estar tan pendiente o más bien, atada a un celular, computadora, televisión, etc. ¡Qué gusto sólo preocuparte de lo realmente importante, de lo realmente interesante, de lo que en verdad se puede aprender!!!

En mi opinión y cómo ya me advirtieron algunos dominicanos/as antes de venir aquí, la gente vive feliz, no ansían como suele ocurrir en los países del norte, aunque también es cierto que yo no estoy en la capital, sino en un pueblito que como característica añadida se encuentra a 10 km de Haití y acoge a muchas personas de este país que se encuentran en situación irregular. Lo que no quiere decir que todos y todas no tengan deseo de mejora y superación.

Pienso en mi vida en Madrid y en mi vida aquí, pienso en la situación de los niños y niñas aquí y comparo con la vida de mi hermano (12 años) allí y me alucino por cómo el hecho de nacer en una parte del mundo u otra determina sobremanera nuestras vidas...

Pasemos a algo más bonito y menos sentimental. Antes de viajar, conseguí gracias a Iñaki, nuestro “profe” de juegos, un paracaídas. Nos ha venido muy bien aquí para hacer un primer intento de integración entre dominicanos y haitianos. Me sorprendió cuando Cristina (voluntaria veterana en La Descubierta) me contó acerca del rechazo que demuestran los primeros hacia los segundos. Esta situación viene de tiempo atrás como hemos podido preguntar a gente de aquí. Por ello se nos ocurrió tratar de hacer al menos una vez a la semana integración. El paracaídas ha sido una buena manera de reunirnos en un gran círculo, darnos abrazos, aprendernos bien nuestros nombres e intentar colar un balón con ayuda de todos y todas en el agujero.

Así mismo, cuento que he podido ver en primer plano las reliquias del padre de esta gran comunidad, Don Bosco, en Barahona, en compañía de Miguel, Luis, María y Vanesa y un cocodrilo americano, existente ya sólo en el lago Enriquillo. Gracias a las hermanas, especialmente a Sor Catalina, pudimos ir a Haití y observar de primera mano lo que anteriormente nos contaban o veíamos en la televisión. Ahora mismo son las 15 30 horas y a las 16 00 haremos un super taller de pulseras y collares con los y las mas grandes del pueblo. Por ello os voy a ir dejando... Creo que a mi retorno, mi vida dará un vuelco impresionante.


Sandra, voluntaria novata.

domingo, 18 de julio de 2010

Mi paso por Haití...

Hola a tod@s!!! Os escribo para contaros mi paso por Haiti. Fuimos, junto con los voluntarios de Barahona, en dos furgonetas con Sor Ángela y Sor Cata. Ya nada más llegar a la frontera tuvimos que esperar un ratito para que comprobasen los pasaportes y nos pusieran el sello de salida del país. Hay cuatro puntos de entrada a Haiti pero, por donde pasan casi todas las ayudas, es por la frontera de Jimani la más cercano a la Descubierta. Nos contaron las hermanas que las primeras semanas después del terremoto se facilitó la entrada de ayuda humanitaria pero ya la situación ha cambiado bastante y se necesitan muchos documentos firmados para poder pasar. Nos contaron que muchas cosas que llegan de ayuda, además de existir los saboteos (por eso hay militares y policías en la zona) los propios Haitianos compran cosas a precios muy bajos para luego cruzar la frontera por las montañas y revenderla más cara a los Dominicanos. Vimos muchos trailer aparcados porque les faltaban papeles. La frontera permanece abierta de 9.00h de la mañana a 18.00h y si llegas más tarde no puedes pasar y tienes que pasar noche al otro lado. A Sor Ángela la pasó una vez y tuvo que esperar hasta las 22.00h para que la dejasen pasar. Una vez que nos dieron paso tuvimos que estar parando en cada control de policía, hay unos cuantos, para negociar con ellos, van buscando dinero. Las hermanas los compraron con unas bolsas de bollos (fundas de pan), es muy fuerte!!!!! Ya pasado todos los controles seguimos el camino hasta la capital, Puerto Príncipe, a una hora y media más o menos de la frontera. La única carretera por la que se puede ir está sin asfaltar con unos socavones impresionantes y muy estrecha. Imaginaros los trailer y camiones pasando por esa carretera, sin comentarios. Por el camino pasamos por pequeñas poblaciones, por llamarlas de alguna manera, con cantidad de gente andando por los márgenes de la carretera cargando en la cabeza con sacos de habichuelas, arroz,….. Las casas de los Haitianos están echas mayoritariamente de yeso o de adobe pero también se ven de ladrillo y, aunque no eran zonas muy afectadas por el terremoto, la gente había levantado una especie de tiendas de campaña con plásticos donde se leían nombres como “Unicef”. Según nos íbamos acercando a la capital la situación empeoró y se veían más tiendas de campaña aglomeradas unas al lado de otras. Pasamos por una ciudad antes de llegar a Puerto Príncipe donde no os podéis imaginar la de gente que podía a ver por todos sitios. En cada rincón había alguien vendiendo cualquier cosa. La poco agua que encuentran en algún río lo embotellan y lo venden. También la pueden conseguir en algo parecido a una bomba de agua, pero vimos muy poquitas, más en la capital. Los campamentos se fueron multiplicando ante nuestros ojos según entrábamos en Puerto Príncipe. Estaban levantados en cualquier sitio, en medio de una plaza, una campo de fútbol, una explanada al lado de la carretera,….La casa presidencial, la catedral y algunas de las iglesias se vinieron a bajo. Pasamos por una zona de calles estrechas donde todo era un caos. Casas medio derruidas, el suelo lleno de basura, muchísima gente andando y vendiendo en la calle hasta los cables de las antenas que se cayeron con el terremoto, coches y motos circulando sin respetar ninguna norma. Al llegar a la capital paramos en dos de las casas que tienen las hermanas. Ambas fueron dañadas por el terremoto. Una de ellas salio más mal parada que otra y están reconstruyendo la escuela que se vino a bajo. Las hermanas tienen una escuela y dos internados. Después del terremoto han acogido a más niñas que se quedaron huérfanas. Les llevamos contenedores de comida para que las hermanas lo suministren. Nos iban a llevar a Torlan, un pueblo cerca de la capital, donde hay 8.000 Haitianos viviendo en tiendas de campañas en un recinto que tienen las hermanas pero Sor Ángela estaba muy nerviosa con el tema de la frontera y no quería que nos retrasásemos por miedo a que nos cerrasen el paso. En las calles hay policías y militares de la N.U. que se encargan de poner orden. Las hermanas nos contaron que hay mucha delincuencia y enfrentamientos entre los propios Haitianos, llamémoslo “ley de supervivencia”. La ayuda de alimentos, supuestamente, sigue llegando pero no se sabe de que forma de está administrando o por lo menos las hermanas lo desconocen. Ellas llevan los asentamientos de los 8.000 Haitianos que están cerca de la capital. No se ve que la situación este mejorando mucho después de 5 meses del terremoto. Todo va muy despacio y se piensa que se están enriqueciendo los más ricos y los pobres son más pobres. Lo bueno, dicen, que algunos Haitianos están trabajando en la construcción de las casas que se derrumbaron. Las casas de los más pudientes y que se les da un dinero. Conocimos a unos militares de Perú que estaban de misión en Haiti y nos contaron que tenían prohibido relacionarse con la población porque se habían dado muchos casos de abuso de mujeres Haitianas que, por un mísero dinero, mantenían relaciones con los militares. También las hermanas nos contaron que antes del terremoto había muchísima gente viviendo en la calle y ahora viven bajo unas supuestas tiendas de campaña y les suministran algo de alimento. El problema está en que ahora viven mejor que antes así que se hace muy difícil echarlos de ahí. Podría seguir contándoos más cosas pero creo que podéis imaginaros más o menos como está la situación. Deciros que si el ver las imágenes por la tele es impactante no podéis imaginar lo duro que es verlo con tus propios ojos. Miseria y más miseria sumida en un completo caos, dejado de la mano de quien saben quien. Parece mentira que habiendo tanta gente enriquecida y con poder se permita que, seres humanos, vivan en el umbral de la miseria. Nadie elige donde nacer. Sólo es el azar el que dictamina si vas a enfrentarte a la vida desde un punto de partida digno o si, por el contrario, vas a tener que luchar desde un nada porque no hay punto de partida. Pensemos positivamente y apostemos por un mundo mejor. BESOS

Raquel Rueda.

miércoles, 14 de julio de 2010

JORNADA EN PUERTO PRÍNCIPE, HAITÍ


A las cinco de la mañana empezaba nuestra jornada. Cafelito, cargar las cosas a la camioneta y a subirnos en la parte trasera. Fuimos a recoger a Manuel y Marcos, dos voluntarios españoles que están en casa de los salesianos. Nos pusimos en camino hasta la Descubierta, donde nos esperaban los otros voluntarios de Madreselva, Raquel, Cristina y Sandra. Al llegar todos nos dirigimos hacia la frontera con Haití. Son muchas las imágenes que hemos visto por televisión, pero nada es comparable a la imagen que tú te puedes hacer al ver este país que está entre los escombros de años de pobreza, y que por mucho que nos cueste creerlo, mucho le queda para salir de esos escombros.

Llegamos a la frontera y ya comenzaba el caos. Guardias armados, personas de inmigración y cientos de personas intentando vender cosas varias, cosas que nadie compra o cosas que han encontrado por el camino. Personas que venden hasta al mismísimo diablo para encontrar unas monedas que les saque de su probreza diaria. Niños que te siguen con la mirada, miran todo lo que llevas por si algo les cae. Cientos de puestos de cosas por vender.

Entregamos los pasaportes, se los llevan y todos les seguimos con
la mirada, nadie se fia del tipo que tiene nuestros pasaportes en la mano. Nos los entregan, nos acercamos hacia la puerta y nos dicen que no podemos pasar. Nos falta un papel dominicano. Minutos de tensión, de conversaciones, hasta que Sor Ángela se acerca al coche, saca una bolsa de pan y se la entrega. Sí. Compramos a los tipos de la frontera con una bolsa de pan.

Arrancamos y comenzamos nuestra jornada haitiana. Lo primero que nos choca es la carretera. La carretera principal del país y esta destrozada, sin asfaltar, es un camino de cabras. Por ahí tuvieron que entrar todos los camiones de ayuda humanitaria. Desde el primer momento te das cuenta de lo que te espera en el país.

Hasta llegar a la capital, Puerto Príncipe, nos encontramos distintos pueblos. Gente por la calle, caminando con la mirada perdida, gente en las guaguas como si fueran animales, no había ni aire para respirar. Personas andando por las cunetas de las carreteras. Puestos de comida, de ropa, de zapatos, de todo. En este país todo se vende. Nos ontaban las hermanas que venden lo que se encuentran o todo lo que les dan. Es su única forma de sacar dinero.

Antes de entrar en Puerto Príncipe ya empezamos a ver campa
mentos de refugiados. Campamentos llenos de tiendas de campaña, cientos, miles de tiendas rodeadas de suciedad y basura. Niños en la calle desnudos, duchándose con una taza de agua. Hombres sacando agua de los pozos, mujeres llevando ese agua con cubos hasta las cercanías de sus tiendas.

Llegamos a la ciudad. Una ciudad destrozada. Escombros por todos los sitios, pocos edificos quedan en pie, los que quedan parecen deshabitados. Tiendas de campaña en los parques, en las rotondas, la ciudad está llena de campamentos. Miles de personas por las calles, miles de puestos. Gente andando, en moto o en coche. Una ciudad abandonada pero llena de vida en la calle.

Pasamos por el palacio presidencia, destrozado. Los edificios siguen igual que hace unos meses. Poco se ha hecho en esta ciudad. Los escombros siguen donde estaban. Una ciudad a la que le queda mucho. Poca ayuda internacional vemos. Una gran besa de Naciones Unidad, pero pocos coches por la ciudad. Algún militar de Naciones Unidas, pero ningún policía. Una ciudad con pena.

Llegamos al colegio de las hermanas, en su día de la gratitud. Vimos las clases en tiendas de campaña y en el patio estabana todos celebrando la fiesta. A pesar de ver esa ciudad como está, aún pudimos ver sonrisas entre los niños. Nos tocaban y nos saludaban. Eramos la sensación, trece blancos entre cientos de negros.

Las hermanas han trabajado mucho por la población, para que todo siga y puedan seguir teniendo su vida.

Al salir de la ciudad todos saliamos impresionados. Puerto Príncipe nos ha sorprendido y nos ha tocado el corazón.

Unos meses después del terremoto, y al salir de país el polvo de la ciudad se había impregnado en nosotros. Salimos llenos de suciedad y de mal olor. Nosotros sólo estuvimos un día, imaginaos la gente que vive allí. Todavía hoy hay personas desaparecidas entre los escombros. Una ciudad que tienen que cambiar de sitio, tienen que buscar una zona del país para crear la capital. Tienen que sacar los escombros y empezar una nueva vida. No saben cuando.

Estamos en época de ciclones, gracias a Dios que todavía no han llegado. Qué será de esa gente que vive en tiendas de campaña, cuando el viento y la lluvia les haga una visita...

LUIS FERNÁNDEZ (10 de julio 2010)

MOÇAMBIQUE E MANINGUE NICE!


Mi experiencia como Voluntaria en Gestión de Proyectos durante seis meses en Moçambique ha sido una toda una experiencia de vida, intercambiar experiencias y conocimientos con los mozambiqueñ@s, conocer de primera mano su día a día y sus costumbres, conocer su cultura y aprender de ella, convivir con gente maravillosa que ahora sé que siempre llevare en un rinconcito de mi corazón….y como es habitual escuchar por allí y resumido en cuatro palabras “Moçambique e Maningue nice”.

Respecto a mi trabajo como voluntaria de gestión de proyectos, he aprendido muchísimo, es un trabajo dinámico, tratando de superar las dificultades del contexto y siempre abierto a las necesidades que vayan surgiendo para llevar a cabo la identificación, seguimiento y justificación de todos los proyectos repartidos por todo el país. Es un trabajo muy gratificante ya que día a día eres más consciente que a través de los proyectos se están haciendo muchas cosas que están mejorando la calidad de vida de los habitantes de Moçambique, y claro tu estas participando en ello, pero también sé que todavía queda mucho por hacer, por ello hay que seguir trabajando duro.

Laura Moyano

lunes, 5 de julio de 2010

DESDE BARAHONA, REPÚBLICA DOMINICANA

Cuando hablamos de República Dominicana nos imaginamos playas del Caribe y lugares exóticos como Punta Cana, sin embargo en otros lugares del país, como en el sur, la realidad es totalmente diferente. Calles sin asfaltar, casa hechas de cartón, maderas y chapa, basura por todos los sitios, niños descalzos, casas sin baño, energía eléctrica que dura unas horas al día… esta es la realidad que estamos empezando a vivir en Barahona. A pesar de toda esta pobreza material, nos encontramos con caras sonrientes, niños que te abrazan y besan aunque te acaben de conocer, mujeres que te invitan a sus casas y comparten contigo lo poco que tienen. Junto a todos ellos, también nos encontramos a cuatro hermanas que viven su fe de una manera especial entregándose a los demás y que brindan todo lo que tienen a sus vecinos. Cuatro seres excepcionales que nos han acogido con los brazos abiertos y que nos han hecho formar parte de su pequeña familia.

Nuestro taller de alfabetización de adultos no ha comenzado todavía, ya que hemos estado celebrando la llegada de las reliquias de Don Bosco. Día de fiesta en el pueblo y en especial en la familia salesiana. Acogida de las autoridades, misa en la catedral y fiesta en Cristo Rey, colegio salesiano.

De momento, esto es lo poco que podemos contaros. Tenemos ganas de empezar y de vivir esta gran experiencia dominicana.

Besos

Miguel, Vanesa, María y Luis

viernes, 25 de junio de 2010

Noticias desde el Chaco

¡Hola a todos! Para los que no reconocen mi correo, os diré que soy Mercedes, voluntaria novata que partió al Chaco paraguayo el 20 de Abril y que está casi terminando su labor acá; justo ahora que muchos de vosotros estais a punto de iniciar esta experiencia de voluntariado.
¡Mucho ánimo a todos! y deciros que a pesar de los momentos difíciles que se puedan pasar, esta experiencia merece realmente la pena y para mi es única, me gustaría que no se me olvidaran muchas anécdotas, vivencias, cosas que ahora no me sorprenden y que en un principio me parecían de otro mundo.
He trabajado como maestra en 4 escuelas de esta localidad, principalmente poniendo mi colaboración al servicio de las profesoras de aquí y también di un curso de formación de una semana a 10 maestros y maestras de varias poblaciones indígenas, fue gratificante y todo un reto para mí.
He intentado disfrutar al máximo de la naturaleza y fauna maravillosa de esta tierra, de su comida, fiestas y tradiciones. Además creo que vine en una buena época para ello.
La vida con las hermanas: Sor Rosanna, Sor Emilia, Sor Fabiola y Sor Mariela ha sido fácil, pues me han hecho sentir en un ambiente familiar a pesar de que se echa de menos a tu gente.
¡Cuántas cosas que trabajamos en el curso de formación cobran todo su sentido al llegar aquí! He sentido como una fortaleza especial que me ha ayudado mucho a ir adaptándome poco a poco a los imprevistos y a momentos difíciles.
Me despido deseando a todos los que os vais pronto un feliz viaje y que disfruteis al máximo de cada momento.
Saludos a todos y en especial a Cristina y Emilia.
Mercedes García Almansa

lunes, 21 de junio de 2010

Celebración del envío 2010

Ayer, domingo 20 de junio, se celebró la ceremonia del envío de voluntarios 2010. Nuestra fiesta final después de un curso preparándonos para una experiencia muy especial. Estábamos nerviosos porque se acerca el momento de salir y vivir durante un tiempo con una comunidad de un país del sur.

En nombre de todos los que formamos la familia de Madreselva les hicimos entrega de una cruz. Su valor material es insignificante pero queremos que los voluntarios y voluntarias se aferren a ella como quien tiene un tesoro y encuentren descanso en su desánimo y fuerza en la dificultad. Ahora os toca a vosotros y vosotras: sed respetuosos, estad abiertos, compartid, no juzguéis su forma de vida, aprended y ofreced lo mejor que tenéis: lo que sois.

Los países de acogida a los voluntarios y voluntarias son: Bolivia, Cuba, Etiopía, Honduras, Mozambique, Nicaragua, Paraguay, R. Dominicana y Angola.

Tuvimos la suerte de tener presentes en la ceremonia a dos hermanas de Haití: Sor Rose Monique y Sor Sylvia. Les hicimos entrega de la cantidad recaudada (2.255,5 euros) en la tarde solidaria. Nos dedicaron unas bonitas palabras que nos emocionaron y nos transmitieron la esperanza que tiene el pueblo de Haití para seguir caminando.

Por último, disfrutamos de las cositas que trajimos para compartir con nuestros amigos y familiares que nos acompañaron.


El voluntario no ha pintado un cuadro,

no ha hecho una escultura

no ha inventado una música

ni ha escrito un poema,

pero ha hecho una obra de arte

con sus horas libres

Todavía hay milagros que los hacen,

los hacéis y los harán

los nuevos voluntarios...


Gloria Fuertes

martes, 15 de junio de 2010

Tarde con Haití

El pasado domingo 13 en el CES Don Bosco se llevo a cabo una tarde solidaria con Haití. Se hicieron diferentes actividades con el objetivo de conseguir dinero para la reconstrucción de una casa hogar en Puerto Príncipe. (Haití)

Aún no se tenemos la cifra exacta del dinero que conseguimos (faltan ingresos pero en breve lo publicaremos) y el domingo 20 entregaremos el dinero en persona a las hermanas encargadas del proyecto en Haití en la celebración del envío.

Desde Madreselva queremos agradecer al grupo No somos los Rolling, a Olga (cooperante en Haití con Jóvenes y Desarrollo), a las hermanas salesianas que nos dejaron el espacio para realizar todas las actividades, a todas aquellas personas que han apoyado y colaborado con el proyecto (donado cosas para el mercadillo, comprando la entrada, llevando comida, disfrutando de la tarde con nosotros...) y no nos podemos olvidarnos de los VOLUNTARIOS. Promotores de la idea y que han estado desde el principio hasta el final.

Muchas gracias a todos y todas.

lunes, 7 de junio de 2010

Tarde solidaria con Haití


Han pasado 5 meses y Haití necesita todavía mucho de nosotros para continuar su reconstrucción. Son muchas cosas pendientes y que aún quedan por hacer. Uno de los proyectos con los que Madreselva quiere colaborar es con la ayuda a la reconstrucción de una casa Hogar en Puerto Príncipe. Para ello, gracias a sus voluntarios a preparado una tarde solidaria con Haití para el domingo 13 de junio. Comenzará a las 16.30 en el colegio Santísimo Sacramento y en el CES Don Bosco ambos en calle María Auxiliadora 9. (Metro Franco Rodríguez, L7) Se realizaran varias actividades:
  • Juegos y talleres para los más pequeños
  • Refrescos y comida "casera"
  • apostaremos por un comercio responsable: con un mercadillo de segunda mano y el comercio justo
  • Exposición de fotos: Una mirada a Haití
  • Testimonio de una cooperante que conoce muy bien ese país antes y después del terremoto
  • Un canto a la solidaridad: No somos los Rolling
  • Exhibición de Grafittis por Haití
  • Sorteo con la entrada...
No os lo podéis perder. Por solo 5 euros (entrada en taquilla o en la sede de Madreselva) puedes hacer mucho...
Además tenemos una cuenta para las aportaciones solidarias (fila cero):
Caixa: 2100 1649 12 0200102956

...Ven y participa!!

lunes, 31 de mayo de 2010

Último día del curso 2009/2010


El domingo 30 tuvimos la última jornada que cerraba el calendario del curso de voluntarios 2009/2010. Nos juntamos los voluntarios veteranos y el grupo de voluntarios nuevos a disfrutar de canciones y dinámicas de Nacho (nos hizo mover el cuerpo con el chipi-chipi y demás canaciones). En esta sesión aprendimos talleres para poder realizar en nuestros diferentes destinos. (Toda la documentación la subiremos a nuestra área privada). Fue una jornada agradable donde se despertó nuestra creatividad, aprendimos hacer pulseras, abejas con pinzas, pin de cometas, cariocas... gracias a Mª Carmen, Paula, Queti, Ceci, Antonio... que compartieron sus talleres con los demás.
Tuvimos la suerte de contar con la visita de Francis, que nos regalo un poco de su apreciado tiempo. Además participaron una pequeña representación del grupo de la universidad de San Luis que junto a Madreselva van a ir a Zway (Etiopía).

Ya sólo nos quedan dos encuentros en mes de junio y se cierra el curso de voluntariado 2009/2010:
Tarde del 13 de junio: Solidaridad con Haíti.
Domingo 20 de junio: Celebración del envío.



miércoles, 5 de mayo de 2010

Sesión de juegos

El pasado 25 de abril nos juntamos voluntarios veteranos y nuevos para disfrutar de una sesión de juegos - taller con Iñaki. La actividad se realizó en el CES Don Bosco. Pudimos contar con la visita de Francis que nos animo y motivó con sus palabras.

En esas 3 horas y media: jugamos, hicimos pompas, conquistamos castillos, fuimos miembros de la cultura alfa y beta... En definitiva, aprendimos muchos recursos, nos reímos y compartimos.

La próxima sesión será una jornada de talleres, dinámicas y canciones.

domingo, 25 de abril de 2010

Cinco años...

Cinco años después.

¡Qué contar! Todas las imágenes llevan el sabor de la ilusión, del aprendizaje, de caras y ojos vivos, de esperanzas, de muchas expectativas, de dudas, de dudas resueltas, de muchos momentos compartidos…Otra vez las mismas caras, y siempre deslizándose una sonrisa encubierta de la que no soy consciente.

Cuántas sensaciones, caminos recorridos y caminos por recorrer. “Chicho:- Todo controlado (Venezuela)”; “Sor Catalina:-¡Qué calamidad!!; ahorita, de repente…muchas palabras humildes que valen su peso en oro.

Francis, Gema, Cristina…Ramón y tantos otros/as que me alumbraban un país nuevo, uno dónde el corazón se llenaba, se renovaba. Humilde e inmensamente rico. Tardes, mañanas en Madreselva, dónde encontrabas almas que desprendían valentía, inocencia, dulzura, también miedos, esperanzas de felicidad compartidas, anhelos, muchos anhelos. Otra vez aparecen caras, Celia, la famosa Kiriki, Elena…

Gente como yo, gente que no esperaría encontrar, gente que empecé a admirar, que me hizo descubrir y redescubrirme. Amigos.

También aprendí idiomas, pude volver a hablar, a mirar con nuevos ojos, saber en dónde estaba, a dónde iba, escuchar a los corazones y escuchar al mío propio. Al regresar, todo era más fácil, las cosas más claras, el ruido de la vida diaria no apagaba el silencio de los recuerdos. Y el día a día lo entendía más. Aprendí (y sigo aprendiendo) idiomas.

Y quiero seguir.

Seguir disfrutando de los mismos momentos dónde te encuentras, dónde el amor es compartido, dónde se sonríe de verdad, dónde los recuerdos te hacen ser interprete de muchos mundos.

A veces te cansas. Piiiiiiiiiiiiiiiiiiiiii…los mosquitos, el relec qué pesadez, las incomodidades, el no ser el protagonista…¡Qué verdaderamente fácil es acostumbrarse a lo bueno, a lo cómodo, a lo fácil! Después de un tiempo el corazón vuelve a ansiar. Quiere seguir siendo corazón.

Y me acuerdo de Grizelma…toda la vida de voluntaria, de países, sin parar, siempre dispuesta …y la dulzura de su voz refleja el bagaje y el peso y POSO de sus viajes. Y sigue…¡Qué envidia!

Y ahora, un nuevo camino, compartido, una luz que viaja conmigo y me arropa. Un futuro que alumbra mi presente. Un regalo. La, lo llevo conmigo.

Mis nuevos compañeros ya están preparándose para salir, nada ha cambiado. Es cómo ver la mejor escena de la mejor película repetidamente. Y seguir sonriendo porque te gusta, no te cansas de verla. Y te sientes feliz porque ves que todo es posible. Qué un pequeño grupo de personas se atreve, y así un año y otro y otro. Y sabes que lo que buscamos todos es posible. Ellos allí esperando y nosotros aquí esperándolos.

¡Qué difícil es contar un voluntariado después de varios años! Lejos de los tópicos, los razonamientos lógicos, los orgullos. No repetirse ¡Qué cuento?

Los hechos, los razonamientos grandielocuentes…se quedan lejos. Intento ver con “mi traductor particular” , en los idiomas que voy aprendiendo, y os veo (a muchísimos más de los que he nombrado y os he dedicado una sonrisa mientras escribía).”Gracias por hacerme un voluntariado”.

Estas son mis reflexiones de “voluntariado”, sé que se podrían decir muchísimas cosas más: cómo ha evolucionado Madreselva, qué cambios se han producido, críticas, ventajas y desventajas, consejos, qué se yo…Pero es que me acuerdo de sus, vuestras caras muchísimo más.

Muchísima suerte, sed muy felices y disfrutad con todo. Ánimo y pá lante!

Permitidme, si acaso, dos consejos (no son míos) que a mí me han ayudado mucho.

“ El amor no lo elegís vosotros, es el amor quién os ha elegido”.

“ La montaña se percibe en toda su plenitud, cada detalle, cada cascada, cada… desde la distancia”.

Khalil Gibran, “El Profeta”


Antonio (Voluntario veterano)

domingo, 18 de abril de 2010

Ser voluntaria...

El querer ser voluntaria es algo que siempre me había rondado por la cabeza, pero que nunca me había planteado seriamente, ni había encontrado el momento para ello, hasta que Antonio me fue descubriendo este mundo (y otros muchos). Yo quedé fascinada con sus experiencias y ese sentimiento dormido en mi interior empezó a despertar. Pero no es suficiente con que te lo cuenten, hay que querer hacerlo y para ello hay que librarse de miedos y prejuicios y tener ganas de ayudar y mucha motivación.

En todo este tiempo que llevo haciendo la formación he aprendido muchas cosas que me ayudaran,o eso espero, en la realización de mi campo de trabajo y en mi vida del día a día, he descubierto una nueva forma de ver la vida, pero lo que más me ha impresionado y más me ha motivado y emocionado... es que en los voluntarios siempre muestran una actitud positiva, nunca tienen malos rollos, una luz especial en la mirada y siempre tienen una sonrisa que mostrar.

Dicen que el voluntariado se hace de forma altruista y solidaria, sin esperar nada a cambio. Yo de momento ya he recibido mucho con las experiencias vividas, los conocimientos adquiridos, la formación recibida y el haberos conocido a todos y cada uno de vosotros. Gracias a todos por vuestro compañerismo y amistad, a Cristina por tu sabiduría y ejemplo y a ti "vida" por ayudarme y acompañarme en mis inicios y primeros pasos por el mundo del voluntariado.

Ahora os dejo con una frase para reflexionar:

"Cada uno puede ser grande, porque cada persona puede servir. No hace falta tener un diploma de la Universidad para servir... Sólo hace falta tener un corazón lleno de tolerancia. Y un alma generada por el amor..." Martín Luther King

Cruz Cano. Voluntaria del 2010

miércoles, 7 de abril de 2010

destino... un país del sur


Por fin llego el día…. Y se presentaron los campos de trabajo para los voluntarios del 2010. Los voluntarios veteranos contaron sus experiencias y orientaron a los nuevos en esta nueva aventura. Son muchas emociones, nervios e ilusiones las que estamos viviendo. En estos días se va concretando más el destino de cada uno de nosotros en los países del sur: “Dar y recibir para construir algo juntos”.

martes, 16 de marzo de 2010

Lead Tree

Aquí os dejo el video que pusé para terminar el fin de semana. Los voluntarios:

  • Nos mojamos
  • Nos esforzamos
  • Somos solidarios
  • Alegres...

Gracias por el fin de semana

viernes, 12 de marzo de 2010

"Analfabeta cultural"



Yo he estado como voluntaria durante el año 2009 en el Centro Laura Vicuña de INHARRIME (Mozambique). El Centro incluye el internado para niñas huérfanas, que acoge a 47 niñas en el momento actual. La escuela Primaria, que poco a poco quiere incluir la oferta educativa de Primaria completa, y la escuela Secundaria, que este año, por primera vez, ofrece la 11ª, el equivalente a nuestro 1º de Bachiller y se convierte en la primera oportunidad para los y las jóvenes del de Inharrime de disfrutar de la educación Preuniversitaria en su mismo distrito, con las consecuencias que esto conlleva.
El Centro Laura vicuña dispone, además de la panadería “Pao do Viajante”, que sirve para autofinanciar en parte, la obra educativa de las Hermanas salesianas, así como unas cuantas hectáreas de tierra que también sirven para autosustento y para venta. Mis labores fundamentales durante este año han sido el acompañamiento y seguimiento escolar de las niñas del internado, por un lado, y el acompañamiento en el Programa de Apadrinamientos del distrito de Inharrime, que incluye a más de 500 niños y niñas del distrito y a unas 200 familias. Hemos comenzado también con un programa de Leche para bebés, pues hay una cantidad importante de bebés que no pueden tomar leche materna, sea porque no tienen madre, porque la madre es seropositiva o porque la madre no tiene leche para el bebé.
Mi experiencia como voluntaria ha sido, si puedo definirlo con una sola palabra, impresionante. No ha sido ésta la primera vez que he participado como voluntaria en un proyecto educativo en un país empobrecido, ya contaba con la certeza de lo enriquecedor que es el trabajo llevado a cabo desde la voluntariedad, lo que no es, ni lejos, el trabajo remunerado, así es, al menos, en mi caso. Puedo decir que, como persona, me he dado enteramente, con ilusión, con dedicación y con convicción. Como profesional, mi área de formación y de vocación es la educación social. He visto mis fortalezas desbordarse y multiplicarse asombrosamente.
Durante el año que he estado en Inharrime han pasado por el centro varias voluntarias, de diferentes nacionalidades, formaciones, intereses y aficiones. Hemos trabajado mucho, con alegría y con buena coordinación interna. Cada una hemos aportado desde nuestra experiencia previa, desde nuestras capacidades y nos hemos adaptado a las circunstancias y necesidades que el momento requería. He aprendido un montón. Aunque no era la primera vez que trabajaba en un internado, sí ha sido la primera vez que he trabajado en un internado para niñas. La diferencia cultural, para empezar, es enorme. El idioma utilizado en el internado es el portugués, por lo que en un lapso de tiempo, no demasiado largo hemos podido comunicarnos bastante bien. Aún así, entender a las niñas, conseguir que ellas me entendieran, más allá del idioma y de las palabras, llegar a ser una figura educativa de referencia para ellas, es todo un proceso que implica mucha dedicación. Yo la he puesto y puedo decir que los frutos se han visto.
El trabajo que hay para hacer con las niñas es enorme y yo, desde mi humildad, he aportado un poquito. La relación con las familias de la comunidad, por otra parte, ha sido preciosa. Han sido, en su mayoría, mujeres y mayores las que se han acercado a los programas de apadrinamientos y de leche para los bebés. Me han parecido mujeres fuertes, sobre todo las abuelas, mujeres que, ante las adversidades han sabido sacar adelante a sus familiares cercanos y lejanos. Aquí el portugués no ha sido suficiente para la buena comunicación y hemos hecho grandes esfuerzos por comprendernos las unas a las otras.
He sido, durante un año entero, lo que yo llamo “analfabeta cultural”. Y lo he disfrutado, porque creo que es una situación privilegiada cuando puedo preguntar con total humildad aquello que no entiendo y que necesito que me expliquen porque yo soy “analfabeta”. Así, a mi posición “privilegiada”, a los ojos de los mozambiqueños y mozambiqueñas, de ser mulungu, blanca, he contrarrestado mi incultura en cuanto al contexto en el que estaba viviendo. He intentado mostrar que no soy más que nadie por tener un color de piel más claro que el de la media y, bueno, creo que este es un trabajo que todavía requiere de mucho tiempo y mucho trabajo.El trabajo con las Hermanas Salesianas también ha sido muy enriquecedor.
He aprendido muchísimo con ellas. He podido ver que el trabajo que llevan haciendo en Mozambique, desde hace tantos años es admirable y he tenido la suerte de tener como “jefa” a una monja con mucha valía personal y espiritual.Fuera del trabajo en el Centro, Mozambique ha sido espectacular. La relación con la gente de allí es un tesoro, que me guardo en mi baúl, no para cerrarlo con llave y dejar que se llene de polvo, sino para pulirlo cada vez un poco más, puesto que, después de esta experiencia en el 2009, me vuelvo para Inharrime dentro de un mes y medio más o menos, para continuar trabajando con las mujeres del distrito, una vez más con toda la ilusión, fuerza, humildad, conocimientos y desconocimientos.Adjunto una foto de algunas niñas del Internado, tabajando duro para que su futuro sea más fácil y mejor para ellas y para las y los que vendrán después de ellas.

Idurre.

martes, 2 de marzo de 2010

Primer paso

Por fin tenemos un espacio para compartir nuestras experiencias con el mundo. Tras una “reñida” votación; Huellas va dar nombre al blog de los voluntarios nuevos, veteranos y de los que están por llegar.
Espero vuestras aportaciones, experiencias, comentarios, fotos… ilustrando la vida del voluntariado tan importante para MADRESELVA.
Acabamos de dar el primer paso… aún nos quedan muchos por dar. Gracias a todos y todas, porque sin vosotros esto no es posible.