lunes, 25 de julio de 2011

En casa

Volver a Barahona es volver a casa.

Nada más llegar a Santo Domingo, todo te resulta familiar, conocido y por

supuesto allí estaba Sor Ángela esperándonos.

Llegar a Barahona es volver

a ver a esos niños que te dan todo su cariño, que se pasan horas y horas jugando con nosotras.

Llegar a Barahona es volver a ver a las “doñas” que te preguntan ¿Cuándo empezamos las clases? Porque quieren seguir aprendiendo a leer.

Llegar a Barahona es volver a vivir en esta comunidad entrañable, Sor Eli, Sor Ángela, Sor Araceli y Sor Kirce.

Llegar a Barahona es volver a ver sus calles empedradas, con sus casas de latón, realidad que nos sigue sorprendiendo.

Llegar a Barahona es volver a disfrutar de las pequeñas cosas de la vida.

Llegar a Barahona es volver a sentir el calor de la

gente, la música….

Y aunque ha pasado un año desde nuestra primera experiencia en Barahona y han pasado muchas cosas por aquí parece que solo han pasado unos días desde nuestra partida.

Vanesa (voluntaria)